sábado, 28 de febrero de 2015

Inundaciones en Escobar*

*Columna de opinión de Juan Martín Manghi para Semanario Regional

El miércoles 25, Escobar fue el escenario de una gran inundación que afectó a todo el distrito. Hasta el momento, se contabilizan dos personas muertas (Ayrton Rubén Francisquelli, de 20 años y Laureano Lara Rodríguez, de 71 años) y más de 200 familias evacuadas.

Esta situación no es nueva: durante años los distritos de la cuenca del Río Luján se ven afectados por importantes inundaciones producto de una planificación urbana en función de los intereses de emprendimientos urbanísticos privados (countries y barrios cerrados) y el crecimiento descontrolado de edificios torre en el casco urbano.
Como venimos denunciando hace tiempo, junto a las organizaciones ambientales de la zona, esta situación se agravó a partir del boom inmobiliario en toda la zona norte donde todos los intendentes han propiciado la modificación del ordenamiento urbano transformando a las áreas protegidas (humedales y alrededores, donde precisamente debe escurrir el agua) en zonas habitables. Los beneficiarios han sido los Constantini y O’Reilly, promotores de emprendimientos inmobiliarios de lujo en la zona de humedales.
El intendente es el principal responsable de esta catástrofe. Su gobierno, en un tratamiento exprés, modificó la zonificación del partido en función de los grandes negociados inmobiliarios. Todo ello ocurrió pese a las advertencias de las organizaciones ambientales y especialistas en el tema. Fiel a su estilo, el municipio emitió un comunicado responsabilizando a la gran cantidad de lluvia que se precipitó y a Autopistas del Sol por no hacer mantenimiento. Insólito.
Dos días después, un grupo de vecinos autoconvocados se acercó al municipio y fueron atendidos por representantes del gobierno. Allí acompañamos el reclamo de la falta de obra pública y la falta de un plan de contingencias frente a una situación que se repite a menudo. Asimismo, se denunció a la policía local que amenazó a los afectados por el corte de una calle. Frente a todo esto, el subsecretario de Desarrollo Social Carlos Tabares no tuvo mejor idea que decirle a los afectados “si no quieren inundarse, presenten una lista y ganen las elecciones”. Nos retiramos de la reunión para decidir los pasos a seguir y se acordó una asamblea de los inundados para la semana entrante.
Por una salida independiente del gobierno y la oposición patronal

Para terminar con las inundaciones y el acaparamiento de la tierra para la especulación inmobiliaria es necesario un reordenamiento urbano sobre nuevas bases: exención de impuestos a la vivienda única e impuestos extraordinarios a la gran propiedad onerosa para financiar un plan de obra pública destinado a desagües y cloacas (que la mayoría de las barriadas no tiene). Indemnización para todos los afectados para la reconstrucción de sus hogares. Por otra parte, está planteada la derogación de la Ordenanza 14896/14 de “rezonificación” que invade los humedales y cursos naturales de agua. Los bloques oficialistas y la oposición apoyaron de manera unánime estas modificaciones, con las consecuencias a la vista. Sólo la acción independiente de los trabajadores frente a estos bloques puede abrir un camino para la satisfacción a estos reclamos.
Juan Martín Manghi


Candidato a Concejal por el Partido Obrero – Frente de Izquierda

viernes, 27 de febrero de 2015

Inundaciones: la naturaleza no es el problema


El pasado 25 de febrero, nuevamente colapsó el distrito bajo una fuerte tormenta en la que cayeron 120 milímetros de agua en dos horas.

Esto provocó la muerte de dos vecinos: un joven y un adulto mayor.
200 fueron los evacuados en los barrios  Stone, Chechela, San Luis y Amancay.
Las cifras de las pérdidas materiales no están cuantificadas pero lo concreto y lo más terrible son las muertes. Ante todo, nuestra solidaridad a sus familias.



LOS RESPONSABLES DE ESTA SITUACIÓN SON LOS QUE GOBERNARON Y GOBIERNAN EL DISTRITO

Todos los que pasaron por la intendencia: Blanco, Guzmán, junto a los concejales de todos los colores políticos son los que permitieron el crecimiento inmobiliario anárquico de megatorres y barrios cerrados sin una debida planificación. Ni siquiera con el asesoramiento de las organizaciones ambientalistas que venían alertando sobre el impacto ambiental que hoy ha costado la vida de dos vecinos de Escobar.
Desde el basural en los terrenos camino al Paraná que Patti cedió a Trasportes Olivos, que contamina hace décadas las napas de agua, pasando por el puerto regasificador, que en caso de derrame provocaría consecuencias imprevisibles para la población. Son clara demostración del caos urbanístico.

LAS OBRAS CRECEN PARA ARRIBA, PERO NO HAY OBRAS PARA “ABAJO”

Está colapsada la red de desagües y frente a la eliminación de espacios verdes por las construcciones no hay donde escurra el agua. Si sumamos a esto la eliminación de parte de los humedales, camino al Paraná, podemos ver que esta situación empeora con el tiempo. Más todavía si tenemos en cuenta los proyectos de construcción del NORDELTA 2, con las consecuencias previsibles.

Las obras tienen que comenzar ya! No debemos permitir que lo utilicen para juntar votos a futuro.
Los que están en el concejo deliberante integrando las bancas del Kirchnerismo, Massismo, los de Macri y Vecinalistas, todos dejaron correr esta situación.

Que se les aplique un impuesto de emergencia a los grandes emprendimientos inmobiliarios para costear las obras que sean necesarias. Los 700 millones de pesos del presupuesto municipal para el 2015  tienen que estar al servicio de las obras para terminar con las inundaciones. La responsable no es la naturaleza, como ingenuamente nos quieren hacer creer desde el poder político. La responsabilidad es de los que gobiernan y permiten estos negociados, que pagamos permanentemente los vecinos de Escobar.

PARTIDO OBRERO Escobar
27/02/2015