APOYEMOS LA LUCHA DE LOS MEDICOS
El gobierno de Daniel Scioli está empeñado en una sistemática demolición de la salud pública.
Acaba de cerrarse el Hospital Carrillo, de Malvinas Argentinas, único centro de salud pública en la zona. Los vecinos no tienen otra alternativa que ir al Polo Sanitario y pagar rigurosamente el arancel para poder ser atendidos.
Hace una semana dejó de funcionar la maternidad del Hospital Fiorito, de Avellaneda, en la que se atendían 200 partos por día. El Hospital Grierson, de Guernica, tiene cerrado el servicio de Neonatología. En el Hospital de González Catán está cerrada la internación de Pediatría desde noviembre 2006. En el de Escobar han cerrado ambos, Maternidad y Neonatología.
En todos los casos el gobierno aduce “falta de personal” profesional, médico y no médico. ¡¡Hipócritas¡¡ ¿Pueden conseguir un médico pediatra por 1.500 pesos por mes??¡¡
Como parte de esta política, el gobierno desplaza supervisoras (elegidas por concurso) y las manda a trabajar como enfermeras, acentuando la dictadura de los funcionarios sobre los hospitales (un ejemplo es el Hospital Mercante, de José C. Paz).
El gobierno Scioli no ha hecho sólo “esto”.
Ha resuelto la “emergencia” en salud durante 180 días, con suspensión de pagos a los proveedores, para “transparentar y ordenar” los gastos de los últimos seis meses de la gestión Solá. Con la “emergencia” el gobierno va a la contratación directa, sin licitación y abre la puerta a nuevos negociados.
El importante paro de los médicos el pasado 26 es una reacción frente a este desmantelamiento en marcha. La CICOP reclama un básico de $ 2.700 para los cargos iniciales con 36 horas semanales, la recomposición de las categorías y la designación de 1.500 profesionales para enfrentar el colapso sanitario.
Han llamado a una nueva huelga para el 5 de marzo.
Ni ATE ni UPCN, ni Salud Pública, los sindicatos que nuclean (en parte) a los trabajadores de la salud no se han inmutado frente al desguace de la gestión Scioli ni se han interesado en tomar la huelga de los médicos como la oportunidad para un movimiento de lucha y un pliego de reclamos de conjunto.
¿Municipalización?
Daniel Scioli ha insinuado, además, la “municipalización” como salida a la crisis hospitalaria.
Las tendencias a “tirarle” el “gasto” de salud a los municipios llevan al desenlace que todos intuyen. La contrapartida es el progreso sistemático del negocio capitalista de la salud, con lo que tenemos el cierre del círculo: medicina asistencial o de mierda para los pobres y medicina de calidad para quienes puedan pagarla.
¿Cuánto de lo que el presupuesto de la provincia determina para el sostenimiento de los hospitales se va en medicamentos dolarizados respecto a la devaluación del 2001, que explican las ganancias millonarias de la industria farmacéutica, o por la vía de la tercerización de servicios a empresas privadas?
El punto final de este proceso es la privatización del propio hospital público, a través de mecanismos abiertos o encubiertos de arancelamiento y/o de tercerización que generan nuevos negocios privados a costa del presupuesto público.
Es necesario impulsar y organizar la lucha para impedir el desguace de salud pública.
Explicar la necesidad de asambleas generales que suscriban el reclamo de los médicos, elaboren un petitorio que incluya absolutamente a todos los que trabajan en los hospitales y debatan un plan de lucha.
Exijir la incorporación de todos los adicionales no remunerativos a los básicos, un salario mínimo al nivel de la canasta familiar y ajuste por inflación. El nombramiento del personal técnico – enfermeros, radiólogos, oxigenistas – necesario para cubrir los requerimientos de cada hospital. La prohibición de tercerizaciones o arancelamientos sin excepción. La instalación de salas de atención médica primaria en cada barrio, con atención gratuita en clínica general y pediatría durante las 24 horas. La constitución de un Comité de Control de la Salud en cada distrito, integrado por representantes electos de los trabajadores de la salud en sus diferentes niveles – profesionales, enfermeros, técnicos, administrativos – por delegados de base de las organizaciones gremiales y por representantes de los barrios electos en asambleas vecinales.
Llamamos a organizar movilizaciones contra el cierre de hospitales y servicios, convocando a vecinos y trabajadores. Vamos en defensa de la salud pública y gratuita, de acceso universal a la población, financiado en base a un impuesto a la riqueza de las grandes industrias y emprendimientos, en particular de la industria farmacéutica.
Acaba de cerrarse el Hospital Carrillo, de Malvinas Argentinas, único centro de salud pública en la zona. Los vecinos no tienen otra alternativa que ir al Polo Sanitario y pagar rigurosamente el arancel para poder ser atendidos.
Hace una semana dejó de funcionar la maternidad del Hospital Fiorito, de Avellaneda, en la que se atendían 200 partos por día. El Hospital Grierson, de Guernica, tiene cerrado el servicio de Neonatología. En el Hospital de González Catán está cerrada la internación de Pediatría desde noviembre 2006. En el de Escobar han cerrado ambos, Maternidad y Neonatología.
En todos los casos el gobierno aduce “falta de personal” profesional, médico y no médico. ¡¡Hipócritas¡¡ ¿Pueden conseguir un médico pediatra por 1.500 pesos por mes??¡¡
Como parte de esta política, el gobierno desplaza supervisoras (elegidas por concurso) y las manda a trabajar como enfermeras, acentuando la dictadura de los funcionarios sobre los hospitales (un ejemplo es el Hospital Mercante, de José C. Paz).
El gobierno Scioli no ha hecho sólo “esto”.
Ha resuelto la “emergencia” en salud durante 180 días, con suspensión de pagos a los proveedores, para “transparentar y ordenar” los gastos de los últimos seis meses de la gestión Solá. Con la “emergencia” el gobierno va a la contratación directa, sin licitación y abre la puerta a nuevos negociados.
El importante paro de los médicos el pasado 26 es una reacción frente a este desmantelamiento en marcha. La CICOP reclama un básico de $ 2.700 para los cargos iniciales con 36 horas semanales, la recomposición de las categorías y la designación de 1.500 profesionales para enfrentar el colapso sanitario.
Han llamado a una nueva huelga para el 5 de marzo.
Ni ATE ni UPCN, ni Salud Pública, los sindicatos que nuclean (en parte) a los trabajadores de la salud no se han inmutado frente al desguace de la gestión Scioli ni se han interesado en tomar la huelga de los médicos como la oportunidad para un movimiento de lucha y un pliego de reclamos de conjunto.
¿Municipalización?
Daniel Scioli ha insinuado, además, la “municipalización” como salida a la crisis hospitalaria.
Las tendencias a “tirarle” el “gasto” de salud a los municipios llevan al desenlace que todos intuyen. La contrapartida es el progreso sistemático del negocio capitalista de la salud, con lo que tenemos el cierre del círculo: medicina asistencial o de mierda para los pobres y medicina de calidad para quienes puedan pagarla.
¿Cuánto de lo que el presupuesto de la provincia determina para el sostenimiento de los hospitales se va en medicamentos dolarizados respecto a la devaluación del 2001, que explican las ganancias millonarias de la industria farmacéutica, o por la vía de la tercerización de servicios a empresas privadas?
El punto final de este proceso es la privatización del propio hospital público, a través de mecanismos abiertos o encubiertos de arancelamiento y/o de tercerización que generan nuevos negocios privados a costa del presupuesto público.
Es necesario impulsar y organizar la lucha para impedir el desguace de salud pública.
Explicar la necesidad de asambleas generales que suscriban el reclamo de los médicos, elaboren un petitorio que incluya absolutamente a todos los que trabajan en los hospitales y debatan un plan de lucha.
Exijir la incorporación de todos los adicionales no remunerativos a los básicos, un salario mínimo al nivel de la canasta familiar y ajuste por inflación. El nombramiento del personal técnico – enfermeros, radiólogos, oxigenistas – necesario para cubrir los requerimientos de cada hospital. La prohibición de tercerizaciones o arancelamientos sin excepción. La instalación de salas de atención médica primaria en cada barrio, con atención gratuita en clínica general y pediatría durante las 24 horas. La constitución de un Comité de Control de la Salud en cada distrito, integrado por representantes electos de los trabajadores de la salud en sus diferentes niveles – profesionales, enfermeros, técnicos, administrativos – por delegados de base de las organizaciones gremiales y por representantes de los barrios electos en asambleas vecinales.
Llamamos a organizar movilizaciones contra el cierre de hospitales y servicios, convocando a vecinos y trabajadores. Vamos en defensa de la salud pública y gratuita, de acceso universal a la población, financiado en base a un impuesto a la riqueza de las grandes industrias y emprendimientos, en particular de la industria farmacéutica.
PARTIDO OBRERO - Provincia de Buenos Aires
8 de febrero 2008
fotos de la marcha del Hospital de Escobar del miercoles 5 de marzo de 2008
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